El país
Burundi, una nación centroafricana, se caracteriza por una compleja interdependencia entre factores geográficos, socioeconómicos y políticos. Su ubicación en la región de los Grandes Lagos, con un terreno predominantemente montañoso y un clima tropical, tiene un impacto significativo en los recursos naturales y el medio ambiente. La alta densidad de población y la dependencia de la agricultura de subsistencia ejercen presión sobre las tierras cultivables y los recursos hídricos.
En 2023, la población de Burundi se estimaba en aproximadamente 13.689.450 habitantes, con un crecimiento demográfico significativo. La distribución de la población es predominantemente rural, con el 86% de los habitantes viviendo en zonas rurales y sólo el 14% en zonas urbanas. La esperanza de vida al nacer es de aproximadamente 62 años para los hombres y 66 años para las mujeres.
Desde un punto de vista socioeconómico, Burundi es uno de los países más pobres del mundo. La desigualdad es marcada y el acceso a servicios esenciales como la educación y la atención sanitaria es limitado, especialmente en las zonas rurales. La historia política del país ha estado marcada por conflictos étnicos e inestabilidad, con repercusiones en la gobernanza y el desarrollo. El sistema político, a pesar de ser una república presidencialista, es frágil y se caracteriza por la opacidad y la corrupción.
Burundi tiene uno de los sistemas de salud más precarios del África subsahariana. Décadas de inestabilidad política, conflicto armado y profunda pobreza han devastado el sector sanitario del país. El acceso a los servicios básicos de salud es extremadamente limitado y hay una grave escasez de personal médico calificado, medicamentos esenciales e infraestructura adecuada. Enfermedades infecciosas como la malaria, la tuberculosis y el VIH/SIDA son endémicas y la mortalidad infantil y materna se encuentra entre las más altas del mundo.
En 2022, la tasa de mortalidad neonatal en Burundi fue de aproximadamente 20 muertes por cada 1.000 nacidos vivos. Estos datos resaltan la urgente necesidad de mejorar la atención neonatal en el país, donde el acceso a servicios de salud de calidad es limitado y los recursos escasos. La Fundación Chiesi, a través del proyecto NEST ( Neonatal Essential Survival Technology), está trabajando para abordar estos desafíos y mejorar la supervivencia neonatal en Burundi.
(Fuente: data.who.int)
Burundi en cifras
Burundi en cifras
Nuestra intervención
La Fundación Chiesi ha emprendido un ambicioso proyecto en Burundi, centrado en mejorar la atención neonatal, en particular mediante la promoción del método Kangaroo Mother Care (KMC).
La colaboración con el Hospital Ngozi fue fundamental para la realización de este proyecto. Después de apoyar la construcción de un área dedicada al KMC, la Fundación concentró sus esfuerzos en la formación del personal sanitario y la difusión del método a nivel provincial.
Un elemento clave del proyecto fue la creación de un manual de KMC y el desarrollo de un modelo de formación específico, adaptado al contexto local. Esto permitió transferir el conocimiento necesario al personal de salud para implementar KMC en sus instalaciones.
La evaluación de los centros de maternidad de la provincia de Ngozi proporcionó una visión completa de la situación sanitaria local, identificando áreas de mejora y necesidades específicas.
El Hospital Regional de Ngozi se confirma como punto de referencia para la promoción del método Kangaroo Mother Care (KMC) en Burundi. Gracias al apoyo de la Fundación Chiesi, en 2023 este centro de salud obtuvo un importante reconocimiento nacional, consolidando su papel como centro de formación en esta práctica fundamental para la supervivencia y el desarrollo de los recién nacidos prematuros.
La integración de KMC en la atención neonatal fue posible gracias al intenso trabajo en equipo entre la Fundación Chiesi, el socio local Amahoro pro Africa y el personal sanitario del hospital. Un elemento clave de este éxito fue el desarrollo de un programa de formación integral, apoyado en materiales didácticos específicos y un modelo de formación innovador.
Durante el año, el proceso de validación nacional de materiales de capacitación representó una etapa fundamental. Gracias a la colaboración con el Ministerio de Salud, se organizó un taller de revisión y perfeccionamiento de los materiales didácticos, con miras a su difusión a escala nacional.
Al mismo tiempo, se iniciaron actividades de capacitación para representantes del KMC en los cinco hospitales provinciales. Estos profesionales, tras recibir una intensa formación teórica y práctica en el Hospital Ngozi, ahora están preparados para difundir KMC en sus respectivas instalaciones.
Además, para fomentar la adopción del KMC a nivel provincial, se organizaron actividades de sensibilización y se realizaron visitas de evaluación para identificar las necesidades específicas de cada hospital. El objetivo es crear las condiciones ideales para la implementación de unidades KMC en los centros sanitarios locales.
Nuestra intervención
La Fundación Chiesi ha emprendido un ambicioso proyecto en Burundi, centrado en mejorar la atención neonatal, en particular mediante la promoción del método Kangaroo Mother Care (KMC).
La colaboración con el Hospital Ngozi fue fundamental para la realización de este proyecto. Después de apoyar la construcción de un área dedicada al KMC, la Fundación concentró sus esfuerzos en la formación del personal sanitario y la difusión del método a nivel provincial.
Un elemento clave del proyecto fue la creación de un manual de KMC y el desarrollo de un modelo de formación específico, adaptado al contexto local. Esto permitió transferir el conocimiento necesario al personal de salud para implementar KMC en sus instalaciones.
La evaluación de los centros de maternidad de la provincia de Ngozi proporcionó una visión completa de la situación sanitaria local, identificando áreas de mejora y necesidades específicas.
El Hospital Regional de Ngozi se confirma como punto de referencia para la promoción del método Kangaroo Mother Care (KMC) en Burundi. Gracias al apoyo de la Fundación Chiesi, en 2023 este centro de salud obtuvo un importante reconocimiento nacional, consolidando su papel como centro de formación en esta práctica fundamental para la supervivencia y el desarrollo de los recién nacidos prematuros.
La integración de KMC en la atención neonatal fue posible gracias al intenso trabajo en equipo entre la Fundación Chiesi, el socio local Amahoro pro Africa y el personal sanitario del hospital. Un elemento clave de este éxito fue el desarrollo de un programa de formación integral, apoyado en materiales didácticos específicos y un modelo de formación innovador.
Durante el año, el proceso de validación nacional de materiales de capacitación representó una etapa fundamental. Gracias a la colaboración con el Ministerio de Salud, se organizó un taller de revisión y perfeccionamiento de los materiales didácticos, con miras a su difusión a escala nacional.
Al mismo tiempo, se iniciaron actividades de capacitación para representantes del KMC en los cinco hospitales provinciales. Estos profesionales, tras recibir una intensa formación teórica y práctica en el Hospital Ngozi, ahora están preparados para difundir KMC en sus respectivas instalaciones.
Además, para fomentar la adopción del KMC a nivel provincial, se organizaron actividades de sensibilización y se realizaron visitas de evaluación para identificar las necesidades específicas de cada hospital. El objetivo es crear las condiciones ideales para la implementación de unidades KMC en los centros sanitarios locales.
Nuestras principales actividades en Burundi
Construcción del Centro Hospitalario Materno Infantil.
Preparación de la sala con equipo médico especializado.
Formación continua del personal de enfermería local.
Reconocimiento del Hospital Ngozi por la formación de KMC.